A una semana de mi primer show, sigo embargado de emoción, a cada momento recuerdo verla cantando y bailando como nunca, en una puesta que, lejos, superó todas mis expectativas. Hubo momentos en que sentía que iba a estallar, otros de puro baile y alegría como en La Isla Bonita, nostalgia rockera en Borderline.
En todos y cada uno de los temas no pude dejar de cantar, gritar, fue una experiencia tremendamente emotiva, sensacional. Madonna demostró (aunque no lo necesite) su título de ûnica Reina del Pop.
Antes de subir algunas fotos, uno de los momentos más fuertes del show, deliré de locuraaaaaa !!
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